Complicidad y buena onda es la clave que une a estas tres actrices jóvenes y llenas de energía. Ubicadas en uno de los salones del hotel Four Season, se dispusieron a hablar con la prensa para dar detalles del trabajo y también, de la vida misma. Emilia Attias es la encargada de romper el hielo.
"Estamos felices. En mi caso, es la primera vez que tengo tanta expectativa por un debut, no lo voy a negar. Me gusta mucho lo que estamos haciendo y lo que vamos viendo. Tengo mucha fe. Hace más o menos entre 15 días y 1 mes que venimos grabando y no vemos la hora de que la gente lo vea. Realmente está muy buena la historia, es fresca, muy real y creo que todos se van a identificar".
- Es la primera vez que trabajan las tres juntas, ¿cómo se dio la química entre ustedes?
Emilia: compartimos camarín y charlamos mucho. A veces hay baches larguísimos y nos encerramos para charlar o tomar mate. Quizás no coincidimos las tres pero estamos bárbaro.
Agustina: yo con las chicas tampoco había trabajado aunque las conocía. Al grupo de hombres, sí y quizás eso te daba más seguridad pero la verdad es que ellas me recibieron bien. Lo que hacemos está buenísimo y también creo que los conflictos que se dan son como los de cualquier persona.
- ¿Sienten que comenzar en diciembre supone un desafío mayor a debutar en marzo, por ejemplo? Termina el año, viene las vacaciones, hay ficciones que tienen su público cautivo...
Calu: no sé si lo llamaría 'desafío mayor'. Cuando uno arranca algo nuevo, siempre tiene desafíos por delante. En mi caso personal, vuelvo a Pol-Ka después de mucho tiempo en Telefé, trabajo con las chicas por primera vez... venía con expectativas de lo que podía suceder y, gracias a Dios, resultó todo muy bien y estoy feliz. Tal como dijo Emi, la historia es terrenal, muy real y cotidiana.
Agustina: coincido. Por ahí es un tema que tiene más en cuenta Adrián, confiamos en él. Yo hacía bastante que no trabajaba en tira, la última que hice fue en 2007, y si bien hice cosas muy chicas después, no me animé a una tira porque tuve a mis hijos. Esta vez tuve ganas de volver y también sentí que si le decía que no a Adrián una vez más, no me iba a llamar nunca más (se ría). El resultado fue positivo, claro que cuesta acostumbrarse al ritmo pero lo llevo con mucha felicidad el resto es secundario.
- ¿Qué es lo que más las atrapó de sus personajes y en qué cosas, si es que las hay, se sienten identificadas?
Emilia: lo que me atrapa de mi personaje es que tiene que hacer un cambio rotundo en mi vida. Es contadora y además, capitana del equipo de fútbol femenino. Es muy estructurada, inflexible, casi masculina te diría. Viene con una pareja de 7 años y está por casarse, pero el personaje de Gonzalo me cambia los esquemas. Mi prima, que es Calu en la ficción en todo ese proceso de transformación, que es bien difícil. En cuanto al parecido, yo soy mucho menos estructurada, menos rígida a la hora de ver las cosas. Sí soy de controlar todo aunque soy más presente a la hora de escucharme a mí y a las señales de la vida.
Agustina: mi personaje arranca con un conflicto muy establecido. Está casada y con una hija de 7 años. Se casó embarazada con su novio de la adolescencia pero ahora no pasa un buen momento en la pareja y decide tomar la decisión. Empiezo en ese lugar, diciendo ‘hasta acá llegué’ y empieza a buscar otras cosas. Así se va acercando al personaje de Nico Vázquez y conociendo un poco más al resto. Ese componente de madraza hace que me identifique, que me pare en otro lugar. Siento por momentos que los guiones están escritos para mí.
Calu: el mío viene del interior, de Rosario y soy la prima de Emilia. Vengo con ganas de evitar problemas y el sueño de ser DJ en el bolsillo. El personaje tiene mucho de mí pero a la vez, es muy relajada en la vida, algo que yo no llego a ser del todo. Por ejemplo: se enamora de Nico, que se está separando, se lleva bien con la hija… se debate entre querer estar con él y querer que esté bien con la familia, al tiempo que se banca las dudas, que él vaya y vuelva. Algo que claramente, Calu no se bancaría (risas).
- Teniendo en cuenta la temática de la novela, ¿quiénes son sus amigas de siempre?
Emilia: mis grandes amigas, compañeras de la vida son mis hermanas. Tengo con ellas un vínculo muy sano y es por eso que con las mujeres me llevo bárbaro. Después fui sumando amigas de diferentes grupos: el colegio, el laburo, de cursos que fui realizando… la amistad es muy importante.
Agustina: yo tengo mis amigas del colegio, las de toda la vida. Obvio que del trabajo me llevo amigos, gente muy querida porque estás grabando con ellos más tiempo del que terminás pasando con tu familia. El tema es que por los ritmos de trabajo, cuando la tira termina quizás te cuesta más verte. Mi amiga del trabajo es Marcela Kloosterboer que es incondicional, que sé que la llamo a cualquier hora y la tengo en la puerta de casa y al revés, pero son vínculos que van madurando también.
Calu: yo sumo amigas de mi infancia con otras del trabajo y de la vida.
- Agustina, sos la única madre del equipo, ¿te dan ciertos privilegios por eso?
No, la verdad es que no porque no soy mamá reciente. Mis hijos ya van al jardín entonces está todo más aceitado en casa. Obviamente, hay toda una estructura de organización que es diferente a las chicas y ellas me cargan porque a las 7 llegan re dormidas mientras que yo, aceleradísima, ya hice mil cosas: llevé a los chicos al colegio, fui, vine y todo eso. Esperé bastante para volver y fue una decisión de los 4 miembros de la familia el hecho de voler.
- Calu, en el medio de las grabaciones te accidentaste, ¿qué pasó?
¿Viste? Pero no fue por el fútbol. Hice un mal movimiento y consulté porque me dio un dolor. Resultó que era un desgarro, mala suerte nada más.
- Retomando el tema de la competencia, ¿les preocupa el tema del rating?
Calu: en realidad, y hablo por mí, en lo único que me afecta es en las energías que se puedan generar en las grabaciones a partir de eso. Si a uno no le va tan bien, la tensión en el aire se siente y te dan ganas de seguir grabando sin salir al aire. Con las críticas pasa algo parecido. Escucho mucho todo lo que me sume, la crítica constructiva y también el boca a boca pero no me engancho con la mala onda.
- Por último, en estos días se fueron haciendo paralelismos entre "Mis amigos de siempre" y "Friends", la popular serie norteamericana. ¿Qué opinan de eso?
Emilia: no tienen mucho que ver las historias porque como dije al principio, esta es una historia cotidiana, con situaciones en las que cada persona se puede ver reflejado. La otra es una sit com, con muchos chistes y 'gags' que acá no están. Son muy diferentes.
Fuente: www.pronto.com.ar
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