domingo, 1 de diciembre de 2013

2014 empieza ahora nomás

Escenas de festejos de fin de año que forman parte de la trama de Mis amigos de siempre, apuesta fuerte de El Trece.

Como todos los años, en 2014, la lucha por el rating entre Telefé y El Trece promete ser sin cuartel. Con la novedad respecto de 2013 de que el canal del solcito multicolor contará nuevamente con la presencia de Marcelo Tinelli en su pantalla. Pero a pesar de ello, por las dudas, para no dar nada de ventaja, Adrián Suar y Pablo Codevilla decidieron empezar a soltar las cartas fuertes de ficción con las que cuentan. Pasado mañana, a las 22, estrenan Mis amigos de siempre , una tira con la que la comedia costumbrista vuelve a las noches de El Trece, de la mano de Nicolás Cabré, Gonzalo Heredia, Nicolás Vázquez, Soledad Silveyra y Osvaldo Laport, entre otros.

La respuesta de Tomás Yankelevich no se hizo esperar y les puso fecha a tres de los proyectos más fuertes que tiene para el verano en el pañol de herramientas con que cuenta el canal para dar pelea por el público. El 6 de enero, en la pantalla de Telefé, podrán verse el ciclo de entretenimientos La nave de Marley y las comedias Señores papis , con Luciano Castro, Joaquín Furriel, Luciano Cáceres y Pato Menahem, y Somos familia , con Gustavo Bermúdez y Ana María Orozco.
Vale la pena acercarse a ver cómo se prepara la comedia con la que El Trece sale a dar batalla y pasar revista a lo que preparan ambos competidores para el año que se avecina.
En Don Torcuato es de mañana y llueve. Pero eso ocurre afuera. Adentro, el barrio es otro. Y también es otra la hora del día. Como lo indican la mesa y los ánimos, para la ficción de Mis amigos de siempre, la nueva tira de Pol-ka que se estrena pasado mañana a las 22, por El Trece, ya llegó la Navidad. Por ahí están los adornos festivos, la sidra y el pionono de rigor y también las cámaras y los micrófonos que intentan no perderse detalle de la escena en la que participa buena parte del elenco de la historia escrita por Jorge Maestro y Claudio Lacelli.
En la cabecera de la mesa, Osvaldo Laport charla con Soledad Silveyra y Claribel Medina que usa la madera como instrumento de percusión. Ellos serán Cholo, Inés y Andrea, las tres puntas de un triangulo amoroso que no será el único del programa con el que Pol-ka vuelve al barrio, al costumbrismo. Para contar la historias de tres amigos de toda la vida a los que el fútbol reunirá después de años de distancia. Ellos son Simón (Nicolás Cabré), Julián (Gonzalo Heredia) y Manuel (Nicolás Vázquez) que justo ahora, en la otra punta de la mesa, parecen haber recuperado la complicidad de la infancia. Aunque con algunas preocupaciones extra.
"Cambiá el humor", le piden a dúo Julián y Manuel a Simón, que no suelta el celular, preocupado porque, separación de su mujer mediante -papel a cargo de Agustina Cherri- podría pasar las fiestas sin siquiera poder saludar a su hija. "Cambiá el humor, enano", agrega Vázquez en uno de los ensayos antes de que el director indique que se puede empezar a grabar la compleja escena de la que también participan Emilia Attias y Calu Rivero, dos mujeres que estarán bien cerca de los personajes de Heredia y Cabré. El primero, un mujeriego futbolista profesional obligado a retirarse por sus lesiones funcionará como catalizador del reencuentro en el centro del relato y el segundo será quién cargue con los conflictos más inmediatos: un posible divorcio y la distante relación con Cholo, su papá.
VEN A MI CASA ESTA NAVIDAD
El cartel de neón indica que el bar en el que transcurrirá gran parte de la trama está abierto, pero esta noche, en la ficción, eso sólo cuenta para la familia y los amigos. El brindis está cerca y con las copas en la mano los hermanos Leo (Manuela Pal) y Fidel (Felipe Colombo) se ríen con los chistes de Bomba (Germán Tripel) y todo parece ir sobre ruedas hasta que el director debe gritar corte porque a Vázquez se le ocurrió avivar la fiesta rociando a todos con sidra y el truco funciona, pero el problema es que la espuma no deja de salir de la botella y todo se complica. El clima festivo, parece, se contagia de la ficción a la realidad aunque el calendario indique que todavía falta para el 24 de diciembre. Será que, fiel a su tradición, el equipo de producción que comanda Paula Granica, logró reproducir al detalle los elementos de un bar como el de cualquier esquina vestido para las fiestas. Por ahí está la barra con un buen surtido de bebidas y, más allá, lejos del alcance de la cámara pero aun en su sitio, un cartelito que indica la promoción del día. Para los curiosos, el 2x1 es de hamburguesa.
Unos pasos más allá hay otra mesa que vuelve a reunir al elenco en una escena. En la ficción será parte del living del moderno loft del personaje de Vázquez que ahora, mientras sus compañeros repasan la letra de lo que se grabará en un rato, se anima a cantar "El amor es más fuerte" a dúo con Tripel que también toca la guitarra. El resto mueve la cabeza y sigue en lo suyo. Hasta que llega el momento de volver al set y la encargada de organizar el traslado lo más rápida y ordenadamente posible es Silveyra que les recuerda que "todavía falta mucho". Es que puede que para la Navidad de mentiritas quede sólo una corta cuenta regresiva, pero para la tarea de grabar una tira que comenzará compartiendo la franja horaria de Solamente vos, esto es apenas el comienzo. O casi. La escena festiva se verá en el episodio doce del programa en el que no sólo los hombres tendrán que salir a la cancha. Para actualizar el tópico deportivo al que la ficción suele recurrir cuando quiere contar historias emotivas, relatos de lucha y sacrificios varios, en Mis amigos de siempre también habrá un equipo de fútbol femenino del que el personaje de Attias será una de las estrellas, motivo más que suficiente para que el seductor Julián quiera involucrarse también como director técnico. Que ella esté a punto de casarse con Luciano (Federico Amador), el jefe de Simón, demuestra hasta qué punto esta tira jugará con los cruces entre personajes, a los encuentros y desencuentros que tan bien funcionaron en ciclos ya clásicos de la productora como Gasoleros y Son amores, entre otros. Éxitos de otro tiempos de pura cepa costumbrista, una forma de contar las historias de amistad y familia que Mis amigos de siempre buscará volver a poner de moda. Para seguir brindando todo el año como si fuera Navidad..


Fuente: http://www.lanacion.com.ar/

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